domingo, 1 de enero de 2012

A veces cierro los ojos.

Y recuerdo todo. Cómo era. Cómo sería. Lo veo todo frente a mí. Un año entero, madre mía, se dice pronto. Ya ha pasado todo un año. Adiós 2011, adiós. Ya se ha ido, para no volver. Ahora toca empezar, reconstruirlo todo de nuevo. Lo que somos, lo que planeamos ser. Y cuando acabe el año haremos como ahora, mirar atrás y ver todo lo que hemos cambiado, si hemos madurado... Un año. 365 días. Y un cambio enorme. Y ahora va a seguir cambiando todo, no hay ninguna duda. Y yo no tengo ninguna pega. Adelante, año nuevo vida nueva, ¿no? Yo creo que sí.

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