sábado, 29 de octubre de 2011

Siempre

nos dedicamos a buscar cosas a lo grande, sin darnos cuenta de que lo que realmente estamos buscando se encuentra en los pequeños detalles, que la vida se compone de esas pequeñas cosas que llenan tus días.

domingo, 23 de octubre de 2011

Hay días

en los que el mundo es mío. Sólo mío. Y lo dirijo como yo quiero, si quiero reír río más fuerte que el resto de personas, si quiero llorar lloro y cubro las estancias con mis lágrimas, si quiero saltar salto hasta llegar a lo más alto. Y te comunico que hoy es uno de esos días. Hoy el mundo es mío.

sábado, 22 de octubre de 2011

Gracias,

por no dejarme caer nunca en la rutina, por hacer de cada día algo nuevo, por hacerme reír a cada instante.
Gracias por ser distinto al resto de la gente, por sorprenderme en cada segundo, por creer en mí incluso cuando yo había dejado de hacerlo.
Gracias por esas palabras, los halagos, por las críticas constructivas, gracias por todo.

Me pierdo entre tus silencios.

Ahí, ¿los ves?

Ahí están, justo al otro lado de este muro. Todos mis sueños.
Están escondidos, esperando a que salte este último obstáculo y los cumpla uno a uno.
Y los miro y los vuelvo a mirar, y los busco y los quiero encontrar.
Creo que ya he esperado suficiente... sólo tengo que saltar este muro y luchar por ellos, por mí, realizarlos al fin.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Supongo que de eso se trata,

no olvidar las cosas que pasan, sino recordarlas sin que duelan. cubrir recuerdos con otros mejores, pues entre el tiempo vuelan.

martes, 18 de octubre de 2011

Alguien me dijo una vez

que las historias más bonitas no son las más largas, ni las más sentimentales, no son las que se escriben intentando gustar a todo el mundo ni las más divertidas, las historias más bonitas son aquellas que se escriben con el corazón.
Las genuinas, las que son de verdad... sí, esa historia que yo quiero escribir a tu lado.

domingo, 16 de octubre de 2011

No esperes a que llegue el momento perfecto;

coge el momento y hazlo perfecto. Convierte las tímidas sonrisas en estridentes carcajadas, las miradas en saludos, sube la música y déjate llevar por ella, no dudes, no pienses.
Simplemente haz que cada momentos supere con creces al anterior.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Ven.

No dudes, no pienses. Sólo ven, seguiré aquí. No te pares, acércate ya. Puedes parar el tiempo, puedes ser tú. Tú y yo. Ven. No te detengas, no digas nada sólo mírame fijamente. Las cosas están como están. No se puede describir esta sensación. No hay palabras que me hagan creer en lo contrario. Ven. Sigue adelante. Un paso tras otro. Sabes que tenemos te quieros de sobra. Sabes quién soy y quien nunca seré. Por eso ven. Por cada momento. Por todo. Ven. Ven a mí. Créeme. Yo no te mentiré. Confía en mí. Sólo ven.

Suena a música.

A un acorde tras otro. A laaaaargos silencios entre medias. A palabras, tus palabras, mis palabras, sus palabras. Sonidos que pueden incluso parecer desafinados. Ratos vacíos, momentos intensos. A un hola y a un adiós. Sabe a tus besos. El olor de la primavera. Un secreto escondido que se lee entre líneas.
Suena a música, es música. Mi música.

domingo, 9 de octubre de 2011

Busquemos París.

Y perdámonos encontrándolo.

Yo no creo en cuentos de hadas,

aunque eso tal vez sea porque no soy una princesa.
No tengo los vestidos más bonitos, ni luzco las sonrisas más brillantes.
No pierdo zapatos de cristal a mitad camino, ni tengo tras de mi una corte de admiradores, mis amigas no son idílicas, no me han escrito jamás una canción, no llego a casa a medianoche ni tengo un hada madrina que cuide de mí.
No soy perfecta.
Pero, sin embargo, aunque no sean los mejores vestidos, a mí me gusta  mi ropa, y aunque no siempre sonría cuando lo hago, sonrío de verdad.
No pierdo zapatos porque tengo demasiada prisa como para retroceder a buscarlos, ni mucho menos espero que sea el perfecto príncipe el que lo encuentre y me lo traiga, mis amigas no son las típicas, están locas, chillan, cantan, me avergüenzan.. pero son las mejores, y aunque nadie me haya dedicado una canción tengo para mí miles y miles que parecen contar mi historia, llego a casa cuando me toca, y no necesito un hada madrina que espolvoreé polvo mágico sobre mí.
Porque la magia soy capaz de encontrarla por mí sola.

Es ella, mi amiga.

La loca más loca de las locas. Y lo sé. Que está loca, me refiero. Y quizás sea eso lo que hace que la quiera tanto.
Ella y esas sonrisas burlonas que me dedica como diez mil veces al día, ella y sus tonterías comparables a las de un niño de infantil, ella y sus interminables manías increíblemente estúpidas, ella y sus caprichos eternos, ella y su manera improvisada de cantar que desafina tanto que puede hacer que te sangren los oídos, ella y las miles de carcajadas que consigue sacarte al día.
Ella, la que está ahí siempre, la que aconseja, la que como me hagan daño se pone hecha una fiera dispuesta a planear la más terrible venganza.
Ella, a la que más quiero. Sin lugar a dudas.